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DESDE COLOMBIA.... |
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Cali, Colombia, octubre 2024
Los primeros meses de nuestra presencia en Colombia, visitamos algunos grupos de oración y de familias que rezan por nosotros desde hace años, aún sin la presencia de nuestra Comunidad, nacieron en varios lugares de Colombia: Barranquilla, Bucaramanga, Cúcuta y Cartagena. Fueron jornadas intensas de oración, testimonios, compartir y amistad, donde todos juntos agradecimos al Señor por la vida de Madre Elvira y de la Comunidad que verdaderamente trae esperanza en la vida de muchos.
¡También nosotros, los jóvenes, nos sentimos en seguida en familia y nos tocó ver cuán esperada y amada era nuestra Comunidad, y cuántas personas que tienen el deseo de servir a la vida!
El primer momento que pasamos juntos fue para el aniversario en el Cielo de nuestra querida Madre Elvira, y fue emocionante ver algunas familias estaban conmovidas al ver que finalmente habíamos llegado y la casa estaba abierta. Agradecemos de corazón a todos los padres y amigos de la fraternidad que en estos primeros meses nos han ayudado y servido en grandes y pequeños servicios, como traer agua, lavar las sábanas y las toallas con mucho amor. Desde que se abrió la fraternidad en Cali, todos los
meses nos encontramos con los padres y amigos de esta ciudad para empezar a caminar juntos y también para que vean cómo camina la fraternidad.
También estamos felices por la visita de Mons. Luis Fernando que vino a visitarnos por primera vez el martes 8 de octubre. Fue una visita esperada, sencilla y conmovedora. Lo recibimos con un canto de alegría y al vernos a todos sonrientes y felices se conmovió y nos dijo palabras sencillas y profundas. Visitó la casa con nosotros y caminando quedó feliz del trabajo realizado, y nos decía que los lugares ordenados y limpios hablan más que muchas cosas.
Durante el almuerzo, nos pidió a cada uno que se presente y diga qué espera del camino en la Comunidad, y luego, él mismo nos contó de su vida de manera sencilla, haciéndonos entender que se había sentido “como en casa” y en familia y agradecía mucho esta semilla de esperanza que nuestra Comunidad ha plantado en Colombia.
Agradecemos mucho la visita de Mons. Luis Fernando que nos trajo el abrazo de la Iglesia y nos empujó para seguir adelante para renacer a la vida nueva.
La Fraternidad de Colombia
