MUJER ¿QUIÉN ERES? EN CATAMARCA

                                                                                                                              Catamarca, Argentina, 15 de junio 2024

 

Donna CatamEn el marco del séptimo aniversario de la “Fraternidad Nuestra Señora del Valle”, El Rodeo, Catamarca, nos congregamos las jóvenes mujeres para hacer el encuentro presencial de Mujer ¿Quién Eres? En el convento de las Hermanas Dominicas, lugar lleno de armonía y presencia viva de Dios que nos ama, sabio y misericordioso. La calidez y amabilidad de las Hermanas nos abrazó desde el inicio, es un lugar verdaderamente hermoso y acogedor.

Nos presentamos: somos las esposas, parejas, novias, familiares, amigas de los  jóvenes que están en la Comunidad, que nos reunimos hoy, llegadas de diversos lugares de Argentina: Catamarca, San Luis, Buenos Aires, Tucumán, ¿por qué estamos aquí? Porque queremos y necesitamos caminar en Comunidad, hacer una amistad verdadera con bases en la verdad y la fraternidad, sin juzgar, escuchando a quien necesite compartir lo que vive, lo que sufre, aquello que le produce dolor y angustia, pero no todo es tristeza, también saboreamos los logros y pasos que vamos dando por las enseñanzas de esta gran Escuela de Vida llamada Comunidad Cenacolo.

¿Cómo queremos caminar y cargar la cruz? Aferrándose a la oración permanente, poniendo en manos de nuestra Madre, la Virgen María, nuestras vidas, nuestra familia, nuestros proyectos, perseverando, incomodándonos, saliendo de ese lugar cómodo y máscaras en el que tantos años estuvimos escondidas, dando pasos de madurez y aceptación.

El encuentro se inició con la celebración de la Santa Misa a cargo de Padre Eugenio, quién en su homilía nos anima a no conformarnos con poco, a dar más y vivir la vida que Dios nos ofrece y quiere concretamente para nosotras: una vida plena, hermosa y no hecha de migajas. Donna Catam 24

Las palabras del Padre nos aclaran cuánto debemos trabajar para dar batalla a las dificultades de la vida, a la superficialidad del mundo, a aquello que aún no podemos aceptar de nosotras mismas, nos enseña que debemos y necesitamos seguir perseverando en una vida llena del amor y la misericordia de Dios. Luego de ello nos reunimos en un espacio interno del Convento donde rezamos el Santo Rosario, nos fuimos presentando individualmente, algunas expresamos lo que habíamos vivido en la Misa, y qué nos había tocado del Santo Evangelio, iniciando así la compartida de un encuentro que daría muchos frutos espirituales.

Pasado ese momento de diálogo llegó el momento del almuerzo, donde seguimos conociéndonos más y entendiendo qué quiere y qué nos pide la Comunidad, qué enseñanzas nos ha dejado Madre Elvira en cada catequesis y cuánto conocía el corazón y las necesidades de los adictos y también de su familia.

A las 15h. se inicia oficialmente el encuentro virtual, se agregaron más integrantes de nuestro grupo de Mujer, ¿quién eres? Hoy Madre Elvira quiere hablarnos del maravilloso don de Educar. “La mujer nació para saber educar, entonces, si yo quiero que el niño sonría, ¿cómo tengo que hacer? Sonrío yo primero. La profesión de Educar es la más difícil del mundo, pero cuando nos miramos a nosotras mismas siempre hay algo que no va…”

La catequesis también nos plantea la hermosa idea de donarse al otro: “Cuando te das cuenta que te olvidas un minuto de ti misma, es porque estás pensando en los otros, y los otros son Jesús nosotros…”

Con una oración final finalizó el encuentro.Gracias Dios, gracias María, gracias Madre Elvira por la Comunidad Cenacolo en mi vida, porque puedo resucitar en cada dificultad que se me presenta, para lograr mirar el futuro desde la Fe yla confianza, por la gracia especial de ese Dios bueno que me ama infinitamente.

 

Testimonio: “Me queda de la catequesis que debo educar no sólo a mis hijos pequeños sino que necesito cambiar y educarme yo misma, dejar que Dios obre en mí, que debo abrir el corazón para que trabaje en mis pobrezas, en mis antiguas formas de ser, que me han hecho daño no solo a mí, sino a los que más quiero. Eso lo puedo hacer desde que estoy en Comunidad porque estoy aprendiendo a conocerme más, a manejarme mejor frente a situaciones en las que siempre me ganaban mi orgullo y mi ego” Rosalía