¡FIESTA DE LA VIDA PARA LAS MUJERES!! |
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Villa Rosa, 10 de marzo 2024
Comenzamos con los preparativos unos días antes para dejar la casa impecable, con situaciones y dificultades entre nosotras, pero siempre luchando para llegar bien a la Fiesta.
Ese día nos levantamos bien temprano, acomodamos las sillas, mesas, y todo lo que faltaba y ya se sentía el aire de fiesta. Nos motivábamos unas a otras mientras llegaban los invitados e íbamos a hacer la acogida. Se sentía un encuentro bastante familiar en el encuentro de los padres e hijos, haciéndonos vivir muchas emociones. La Fiesta se inició con la oración del santo Rosario y algunos gestos, dando mucha alegría. Luego llegó el Obispo Auxiliar Justo para celebrar la Eucaristía y nos habló de este tiempo de Cuaresma, que tenemos que morir para resucitar con el Señor. Que cada uno de nosotros, sea dentro o fuera de la Comunidad, tenemos una adicción, como la codicia, envidia, avaricia que nos matan por dentro y no nos damos cuenta, recomendó dar todo eso a Jesús disponiendo nuestro corazón para Él.
Luego compartimos el almuerzo con todo lo que habíamos preparado, más la Providencia de los padres y amigos, más una rica parrillada de chorizos y hamburguesas, y una rica mesa de dulces.
Cuando nos volvimos a reunir, Elisa presentó a la Hermana Mely, una argentina que hace 20 años que es una de las religiosas de las Hermanas Misioneras de la Resurrección, orden fundada por Madre Elvira y confirmada por el Papa en 2009. Nos habló de lo que son las misiones de la Comunidad -ella está en África- y nos motivó para elegir el camino de la misión. Luego, Padre Eugenio nos transmitió cuánto amor y bondad que donaron algunas personas que ya se habían ido al Cielo, destacando la importancia de Daiane.
Luego, algunas chicas hicieron el baile de las Máscaras. Se disfrutó bastante porque transmitía cuántas veces llevamos una máscara, pero gracias a la luz y a nuestro camino en la Comunidad también podemos reconocer nuestras pobrezas y dones para poder amarnos y amar a los demás. Dos de las chicas dieron testimonio y sus palabras llegaban al corazón, transmitiendo cómo nos ayuda la Comunidad a tener una vida nueva.
Luego vino la Adoración y abrimos nuestros corazones para dejar entrar a Jesús, se sentía la presencia del Espíritu Santo tocando corazones. Nos despedimos con el corazón rebosante de gracia y alegría
¡Gracias Madre Elvira, porque a través de tu SÍ vemos nuestras vidas resucitadas y podemos decir que “Somos Obra Suya”!
¡Gracias por esta gran familia del Cenacolo! ¡¡Los queremos!!
Las chicas de Villa Rosa
Testimonios
La celebración del aniversario de nuestra casa se vivió en ambiente de fiesta. Recibí la visita de mi hermana y de varios amigos, no los esperaba y fue un hermoso encuentro, fruto de la oración. La fiesta comenzó con los gestos, cuando luego, rezamos el Rosario me sentía feliz y entregué a Dios todo lo que iba a vivir. Me conmovió el testimonio de Hermana Mely sobre la misión del África, las necesidades que tienen. Cuando bailé el Baile de las Máscaras estaba ansiosa, y luego en mi testimonio me di a conocer y también los logros en la Comunidad. Antes de que se vayan, pude hablar libremente con mi hermana, agradecerle por su visita y daba gracias a Dios por el día de encuentro que había vivido. Adelaida
Mi nombre es Analía, amiga de la Comunidad, quería contarles mi testimonio. Poder participar de la Fiesta de Villa Rosa fue una providencia de la que estoy muy agradecida a Dios Padre y a mi querido San José. Respirar Comunidad y tener todo listo fue agotador pero agradable, creo que es sano incomodarse y donarse a los demás. El día de la fiesta fue genial, ver tantos amigos y conocidos me hacia sentir en familia, una gran familia. La casa de las chicas la siento mi casa y poder vivir en amistad con ellas lo vivo con alegría. Estábamos a distancia, vendiendo las artesanías que hacen las chicas, pero atentas a cada palabra y cada gesto participamos en todas las celebraciones. La fiesta fue hermosa, muy acogedora, vivida mucho desde lo espiritual y lo fraterno. Doy gracias a Dios y a Madre Elvira por esta gran obra de amor y amistad. Analía
Hola, me llamo Maximiliano y estoy en la Comunidad hace un año y 7 meses; soy de Argentina y estoy en la casa de Pilar desde hace 4 meses. Esta Fiesta de la Vida de Villa Rosa la viví muy linda, con muchas ganas de ver a mi familia, especialmente a mi papá, poder compartir con él muchas cosas de mi camino comunitario. Sentía lindas cosas al poder abrazarlos decirles cuánto los quiero y que sigan así. Es hermoso vivir una adoración con mi mamá, abrazarla y decirle que la amo mucho y decirle gracias por darme la vida, que hoy me siento feliz en lo que hago y que siempre voy a estar agradecido a la Comunidad que ya es parte de mi vida. ¡Amo la Comunidad y quiero seguir adelante! Maximiliano
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