Cuaresma en Eslovaquia

slov1Eslovaquia, Fraternidad “San Cirilo y San Metodio”

Tiempo de Cuaresma, abril 2020

Esta es mi segunda Cuaresma en la Comunidad. Este año es distinto por el coronavirus que está cambiando mucho nuestras vidas. Sabemos que en el mundo la situación es más difícil; en la Comunidad sentimos que estamos bendecidos y protegidos por Dios. En los últimos días comprendemos qué gran don es estar aquí! Creo que esta situación es una posibilidad para comprender qué es lo más importante y para agradecer a Dios por lo que nos ha dado. Se trata de un tiempo que nos pide estar más unidos en la oración, ayudándonos y con esperanza para superar las dificultades. Rezamos más, la oración ahora es nuestra única ayuda. Tratamos de ser más ayuda uno para el otro. MARCEL

Esta Cuaresma es un tiempo en el que puedo donarme más a los otros. En la fraternidad tenemos muchos “chicos jóvenes” que viven la Cuaresma por primera vez y es bello ver cómo van cambiando. Me da alegría. Reconozco que es una gracia de Nuestro Señor Jesús en este tiempo en que están cambiando muchas cosas en el mundo. Sirve para ver qué es lo importante en la vida. Estamos más unidos en la oración y hacemos Adoración todas las tardes, a la hora de la Divina Misericordia, por todo el personal sanitario y todos los enfermos y por todos los que hacen servicio en este tiempo. Esta oración le hace bien a toda la fraternidad. Por una parte se siente el silencio y el miedo pero por otra estamos más unidos. Doy gracias a Dios de poder vivir todo esto en la Comunidad. Aprecio más el valor de la Santa Misa y el Sacramento de la Reconciliación…¡Una buena prueba para nuestra fe! MICHAL

Empecé a vivir la Cuaresma un mes antes, al ser parte del grupo litúrgico tenía que preparar todo el programa. Preparamos cinco novenas para vivir este período como un camino con Jesús: nos slov2esforzamos en vivir mejor la amistad, el servicio, la oración, la renuncia y el donar la vida. También preparamos una pizarra que nos guía. Para mí fueron buenos momentos, pero difíciles a la vez. En particular, mi empeño fue traducir y preparar las meditaciones del Via Crucis cuando todos se iban a dormir. En cierto sentido fue vivir el Via Criucis, perofue bello superar el cansancio e incomodarse. Esta Cuaresma la estoy viviendo como un servicio a los demás. Estoy agradecido de poder vivir la Cuaresma en la Comunidad. JAKUB

Al principio no lograba vivir bien la Cuaresma. Hacía las cosas porque las hacían todos. No sabía lo que significaba “renuncia” ni creía en su valor. Siempre que hice una renuncia era para aparecer como “Bueno” a los ojos de los demás. Poco a poco, con tiempo, comencé a buscar el sentido de la renuncia. Ahora la renuncia está reforzando mi voluntad: creo que cuando hago una renuncia se la puedo ofrecer a Jesús. Vivo la Cuaresma como un sufrimiento, pero estoy entendiendo que es solo una pequeño parte de lo que sufrió el Señor por nuestra salvación. Siento que la Cuaresma me está ayudando a estar más seguro y puedo esperar la Resurrección de Jesús con el corazón abierto. El coronavirus me hace pensar cómo vivimos los hombres. Siento más la presencia de la Virgen y no veo solo sufrimiento, sino la posibilidad de acercarme más a los demás para estar más unidos, poniendo todo en las manos del Señor. Tengo tiempo para pensar en mi vida de antes y en lo que es verdaderamente importante ahora para mí. JURAJ