NEWS DE LIBERIA


liberianewsMisión Santa Josefina Bakhita,

8 de marzo 2017

“La Providencia es una gran Bella Señora, es la “maternidad” de Dios, la belleza del rostro materno de Dios, luminoso, fascinante, que se inclina tiernamente hacia nosotros cuidando a sus hijos.” Madre Elvira

Queridísima Madre Elvira y queridísimos todos,
En este día especial en que, querida Madre, recordamos tu ingreso al convento, tu “sí” a Jesús, queremos contarte un episodio que nos mostró una vez más qué grande es la ternura de Dios.

El domingo pasado estábamos casi listos para almorzar cuando de improviso vimos que llegaban muchos autos cargados de personas. Mirábamos asombrados los Jeep y las Pick up llenas con más de cincuenta jóvenes y no tan jóvenes. Gran sorpresa cuando nos dimos cuenta que eran nuestros amigos de la parroquia que venían con nuestro párroco, el Padre Paul!
Estaban elegantísimos porque aquí en Liberia todos se visten bien los domingos para agradecer y alabar al Señor: en efecto, luego de celebrar la Santa Misa vinieron todos juntos. Descendieron de los autos, nos abrazaron y nos dijeron: “Vinimos para estar un poco con ustedes y a darles las gracias.” Luego descargaron frente a nuestra cocina muchísima Providencia: bananas, arroz, detergente, papel higiénico, agua, jabón de tocador, esponjas…verdaderamente muchas, muchas cosas, además una bandeja repleta de riquísimas golosinas caseras.

Cantamos, tocamos y bailamos con ellos algunos cantos liberianos para agradecerles y sentirnos en familia, luego el coro nos dedicó dos bellísimas canciones Gospel. Luego de ese momento, algunos tomaron la palabra para expresarnos su estima y agradecimiento por lo que hacemos. Ese momento fue un gran don de Dios, una caricia de Jesús, para recordarnos que a pesar de nuestro cansancio y debilidad, Él está contento con nosotros. Antes de despedirnos nos sacamos una bella foto todos juntos: nuestros corazones estaban llenos de alegría y reconocimiento a Dios que se nos revela como Padre atento y amoroso en el rostro de muchos amigos que nos quieren.

Gracias Madre Elvira porque, al subir a ese tren, nos llevaste en esta espléndida aventura que es la vida de la fe. Qué historia…pensar que estábamos aburridos y cansados de vivir…Hoy podemos reconocer que Dios existe, que somos amados por Él, que somos importantes para Él.
¡¡Gracias Gracias Gracias!! Querida Madre Elvira, te encomendamos a la Reina de la Paz, rezamos por todos ustedes.

We love you plenty OH!!
La familia Liberiana