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NEWS DE LIBERIA!!! |
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Miércoles 22 de diciembre 2021
Misión “Santa Josefina Bakhita”, Liberia
“La Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emanuel,
que traducido significa: Dios con nosotros.” (Mt 1,23)
Queridísima Madre Elvira, queridísimo Padre Stefano y queridísimos todos, aquí les traemos noticias de nuestra misión de Liberia.
Hace diez años que abrimos nuestra fraternidad y cuánta vida que ha pasado y que todavía llega para ser educada, amada, acompañada en este lugar tan especial y bendecido por la presencia de la “Reina de la Paz. Agradecemos por la vida de Cristian, un niño que lo habíamos recibido cuando tenía 13 años; en la Comunidad descubrió su pasión por la cocina, cuando salió lo ayudamos a desarrollar su talento. Hoy tiene 21 años y es un joven bueno y alegre: ¡qué alegría ver que terminó la escuela y participar en la entrega del diploma!
Nuestros niños crecen y llega el momento de las elecciones importantes: ¿Cuándo sea grande qué voy a hacer? ¿Qué quiero para mi vida? Lo ponemos en las manos de la Virgen y luego los ayudamos a discernir y a llevar adelante lo que los hará realizarse y los hará felices. Tres de los más grandes comenzaron este año la escuela profesional, uno para ser sastre y dos electricistas…rezamos más que nada para que sean ciudadanos honestos y hombres de fe.
En Liberia el 60% de la población es analfabeta, ir a la escuela o poder ser atendido en un hospital no es todavía un derecho sino un privilegio. Les contamos la historia de Mohamed, nuestro “hombre del pan”, que nos trae el pan a casa. Hace 10 días, dos personas trataron de robarle la moto, él no se las dio y le arrojaron ácido en el rostro, afectándole la mitad de la cara. Vino a traernos el pan y nos dijo que no había venido el día anterior porque tuvo un “pequeño” accidente: ¡qué humildad y qué dignidad!
Lo enviamos al hospital para que lo vea a Marlon y no cesaba de agradecernos.
La Providencia abre puertas, crea caminos de colaboración inesperados, bellos, luminosos. Gracias a la presencia de Marlon, que trabaja como médico en el hospital y gracias a la colaboración con los amigos de “Corazón Hermano” ( la asociación gracias a la que pudimos operar del corazón a Blessing en Italia) estamos ayudando a muchos niños que lo necesitan. Este es un hecho concreto, pero tenemos muchas historias de bien para contar.
Teresa es una niña de 9 años que llegó al hospital con un estómago enorme. Parecía que el corazón se le salía del pecho y el bazo tan inflamado que parecía embarazada de 9 meses. La operaron y le extirparon el bazo y ahora Theresa puede vivir y jugar como una niña normal.
Por favor recen por nosotros porque son muchas las cosas bellas que Dios quiere hacer en esta colaboración con los amigos de “Corazón Hermano”.
Nuestra escuelita sigue funcionando: este año, Sabina da clase a 7 de nuestros niños que van a primer grado y coordinó con dos maestras liberianas que vienen a enseñar a los otros pequeños de la misión.
En este período tuvimos el don precioso de la visita de tío Albino, nuestro responsable de Estados Unidos, y que trajo a tío Junior de Brasil y a tía Eileen de América. Nos hizo mucho bien ver a Albino feliz y asombrado de la vida que crece dentro y alrededor de la misión. Estamos en una tierra lejana y sentir el abrazo, la confirmación, el respaldo del corazón de la Comunidad es muy importante para nosotros. Con sonrisas, los diálogos, la presencia de tío Albino, sentimos que Madre Elvira nos decía en el corazón: “¡Confío en ustedes! ¡Adelante!”
Junto con Albino fuimos a visitar el leprosario de Gantha, al norte del país. Le habíamos encargado a uno de los pacientes que realizara un tabernáculo y el altar para la casa de las hermanas aquí en la misión. Este joven que se llama Johnatan, realizó un trabajo asombroso con sus manos gravemente enfermas de lepra.
Agradecemos a la Providencia por el trabajo de tantos tíos y amigos que permitieron construir un espacio para nuestras hermanas. No fue fácil porque somos pocos y fue un año de mucho esfuerzo por el covid y muchas otras dificultades, pero hoy contemplamos los frutos de la unidad, de la oración y de muchos sacrificios vividos con amor.
Sentimos que la oración, sobretodo la Adoración Eucarística, es el motor que nos sostiene, nos protege, nos une, nos da la fuerza para continuar. A veces recibimos caricias de Jesús que nos sorprenden y nos conmueven, una de ellas es la presencia, aquí en el terreno del santuario, del Obispo Emérito Mons. Luis Ziegler. Es un anciano débil y enfermo pero siempre está dispuesto a recibirnos y bendecirnos. El día de la Inmaculada pasamos a saludarlo durante la procesión al santuario y el rezó largamente sobre nosotros con dulce paternidad y mucho amor.
Jesús viene como un pequeño niño, pobre e indefenso, y nosotros tenemos el privilegio de contemplarlo en el rostro de nuestros niños y de muchos amigos y vecinos.
Jesús viene también en el rostro de los presos. Agradecemos porque algunos de nosotros llevaremos alimentos y Providencia a la cárcel de Monrovia, junto a las hermanas de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta, con las que tenemos una bella amistad desde el principio.
Queridísima Madre Elvira y queridísimos todos,
¡¡¡JESÚS HA NACIDO!!!
¡Que cada uno de nosotros pueda recibirlo con mucho amor y mucha alegría en el pesebre de su corazón!
Los queremos mucho (We love you plenty, OH)
La familia liberiana