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Fiesta de la Vida en Perú |
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Perú, 30 de noviembre – 1 de diciembre 2019
“La vida es movimiento…la vida es pensamiento…la vida es dar…la vida es recibir…Debemos dar sentido a todo esto…el único significado verdadero es el amor” (Monseñor Carlos )
De la homilía de Monseñor Carlos:
“La vida es movimiento…la vida es pensamiento…la vida es dar…la vida es recibir…Debemos dar sentido a todo esto…el único significado verdadero es el amor”.
Este fue el corazón central de nuestra Fiesta de la Vida. Dos días de alegría, de compartir, encuentro y amistad.
Todo comenzó el sábado en nuestra casa de Villa Salvador, donde se encontraron los padres de los jóvenes de Supe para prepararse para el encuentro con los hijos…fue preciosa la presencia de Don Michel, que con la ayuda de las hermanas y de los responsables de las otras casas, fueron creando el ambiente justo de oración y reflexión…sin que falten momentos fuertes de emociones y de alegría. Fue una sorpresa ver la gran participación de las familias, tanto de los padres nuevos, con el hijo en la Comunidad, como de padres fieles que permanecen cercanos aunque sus hijos hayan tomado otro camino. Ellos son el ejemplo y la ayuda necesaria para estas familias nuevas.
El domingo nos encontramos todos en “Rayo de Luz”. Estaban las otras dos casas, Villa Salvador y Supe, estaban las familias, los amigos, los vecinos, las hermanas de la parroquia…en fin todas las realidades presentes en nuestro mundo cotidiano se reunieron para hacer Fiesta a la Vida… Se sentía aire de fiesta y de familia porque cada uno estaba disponible, no eran espectadores sino protagonistas…Supe nos ayudó con los preparativos, los amigos con la venta en el “banchetto”, las tías de Villa Salvador nos divirtieron con su baile…y al final, los niños, con los tíos y tías trajeron a Jesús al corazón de todos los presentes interpretando el nacimiento…. Y este año, con Don Michel, presentamos a la gente el verdadero Pan de Vida…haciendo un momento de adoración en la Gruta de Belén. En fin, fuertes emociones y muchos momentos que nos ayudarán a comenzar bien el Adviento, a vivir la Navidad.
Otro momento importante fue durante la Santa Misa que nuestra tía americana, Katlin, recibió su cruz misionera…El Señor no podía elegir para ella mejor momento, ya que está viviendo la “cruz” de sus familiares, en especial de su hermano menor que no está bien de salud.
Gracias a Dios por su inmensa Providencia y presencia en nuestra casa.
Agradecemos a todas las personas que han hecho posible un año más, esta fiesta.
Los encomendamos a María que gracias a su “Sí” ha cambiado al mundo.
¡Buen camino de Adviento!
Vuestra Familia de Perú
