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ENCUENTRO DE AMIGOS EN TARRAGONA |
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España. 30 de septiembre
Celebración de la Fiesta de Nª. Sª de Misericòrdia, en la Comunidad Cenacolo, en Cornudella, Santuario de Reus.
El sábado 30 de septiembre de 2017 en la fraternidad de Mas d’en Lluc celebramos con gran alegría la fiesta que ofrece cada año el arzobisbispo de Tarragona, Mons. Jaume Pujol, para dar a conocer la Comunidad Cenacolo.
El día empezó con la santa Misa presidida por el arzobispo y concelebrada por el padre Máximo de la Comunidad Cenacolo y por Mons. Miquel, párroco de Cornudella. En la homilía, el arzobispo agradeció a Madre Elvira la confianza que depositó en él para abrir la casa y a los amigos de la Comunidad por su dedicación y providencia con los chicos. Dijo que la Comunidad es una Escuela de Vida dónde el AMOR que nace de la cruz de Cristo, es el motor de la Comunidad. 
Un AMOR que logra que los chicos recobren su dignidad y consigan recuperar la alegría perdida. Continuó diciendo que todos somos testigos de los milagros diarios que suceden en la Comunidad Cenacolo y que hemos de ser transmisores al mundo. Terminó diciéndoles a los chicos que eran la “central eléctrica” que alimenta a toda la diócesis.
Al concluir la Santa Misa, Don Máximo nos dirigió unas palabras de agradecimiento a los amigos de la Comunidad por la providencia espiritual y temporal para con los chicos. También comentó que el “SI” de Madre Elvira para abrir esta casa fue ver la humildad y sabiduría de Mons. Jaume. Finalmente comentó que Madre Elvira está estable en su enfermedad, que se la ve alegre y muy presente.
Después de la Santa Misa, compartimos la comida elaborada por los chicos. Pudimos contar con la presencia de los recién casados Alexis (que estuvo 5 años en Comunidad) y Ángela (originaria de Estados Unidos) que ahora viven en Tarragona. En la sobremesa hubo testimonios muy interesantes. Hablaron Martín y Alexis como chicos que ya están fuera de la Comunidad. Fueron unos testimonios muy interesantes para los chicos que ya llevan un cierto tiempo y está próxima su salida. Y dio su testimonio Juan Ramón, un gran amigo de la Comunidad.
Acabamos este día de bonita convivencia, agradeciendo a nuestra Santa Madre su maternal protección con el rezo del Santo Rosario.